James Spithill: "Ganar ha sido una sensación increíble"

Como se cambian las papelas, el australiano Spithill, de 31 años aumenta su gran palmarés en vela con los que abochornó unos años antes cuando a la caña del Luna Rossa, vapuleó el segundo intento de Larry Ellison de conquistar la Copa América, al despedirlos de la competición en semifinales de la Copa Louis Vuitton con un contundente 5-1.

No podía ser de otra manera, los sueños del pelirrojo nacido en Sydney, con familia de tradición en la vela comenzaron a fraguarse de niño. Fue con 20 años, el caña más joven de la Copa América de 2000 con el barco Young Australia y pronto se hizo un nombre en el circuito internacional de match race, donde en 2005 se proclamó campeón del mundo. En la edición Auckland 2003, manejó la caña del OneWorld, acabando tercero en la Louis Vuittón. En Valencia 2007, Spithill era el caña del italiano Luna Rossa y tras su excepcional actuación eliminando al BMW-Oracle, cayó en la final de la Louis Vuitton ante otra discípulo del maestro Coutts, el neozelandés Dean Barker, que le batió con el New Zealand por 5-0.

Tímido, celoso guardian de su privacidad, casado y con un hijo, se transforma a la caña donde es frio y siempre utiliza el ataque, por su edad, erá sin duda un campeón de Copa América de largo recorrido, el australiano tuvo palabras de agradecimiento para todo el equipo. "Se ha dedicado una cantidad de trabajo muy grande en el barco y se han tenido dos regatas sin problemas", destacó.

Spithill subrayó que "los diseñadores y los constructores han fabricado una herramienta impresionante" como es el trimarán con el 'ala' rígida con el que han vencido a Alinghi con superioridad.

El patrón destacó que "ha sido una regata increíble". "Fue muy emocionante desde el principio", afirmó el australiano, que no paró de fotografiarse a bordo del 'USA 17' con el propietario del equipo, Larry Ellison, y con el resto de la tripulación. Spithill hizo una 'pasada' por la popa del barco de Ellison, el 'Rising Sun', para ofrecer la victoria.